Se trata de una novela de culto en norteamérica. La escritora nos va desvelando la vida del personaje protagonita, una chica universitaria que arrastra una infancia de desgracias familiares, una educación paterna religiosa y restrictiva, algún oscuro secreto y una inteligencia y clarividencia especial sobre lo que la rodea.
De fondo, la estupidez de las hermandades universitarias en EE.UU, el racismo, el ecologismo y algunos despuntes sobre el feminismo; la importancia de la naturaleza, reflexiones sobre la vida, el sexo y la muerte y mucha literatura. La relación padre-hija vertebra toda la historia.
La acción se va desarrollando a saltos temporales, a veces simultáneos, que tejen el presente con el pasado. Con un lenguaje clarividente, que no se queda en la estructura fácil, un estilo imprevisible y algo lírico, de características únicas. Justo lo que sientes al leer esta novela, como si el personaje perteneciera a un mundo único, que es desplegado con maestría ante nuestros ojos por la autora Joy Williams.

