Nicanor Parra

Lo queramos o no
solo tenemos tres alternativas:
el ayer, el presente y el mañana.

Y ni siquiera tres
porque como dice el filósofo
el ayer es ayer
nos pertenece solo en el recuerdo:
a la rosa que ya se deshojó
no se le puede sacar otro pétalo.

Las cartas por jugar
son solamente dos:
el presente y el día de mañana.

Y ni siquiera dos,
porque es un hecho bien establecido
que el presente no existe
sino en la medida en que se hace pasado
y ya pasó…,
como la juventud.

En resumidas cuentas
sólo nos va quedando el mañana:
yo levanto mi copa
por ese día que no llega nunca,
pero que es lo único
de lo que realmente disponemos.

El autor Nicanor Parra (San Fabián de Alico, Chile, 1914- La Reina, Chile 2013) ha recibido numerosos y prestigiosos premios como el Nacional de Literatura en Chile (1969), el Premio Reina Sofía de Poesía Iberoaméricana y el Cervantes (2011). Habría tanto que escribir sobre él, que poco diré. Este poema pertenece a Obra Gruesa.

Se declaraba «antipoeta» y fue matemático, físico y académico de la Academia Chilena de la Lengua. Perteneció a una reconocida familia de artistas, su hermana es la famosa cantautora Violeta Parra.